Por Marcela Milone. Hasta el
domingo pasado, hubieron dos candidatos a presidente similares y amigos, competidores, deportistas y
ambiciosos.
Se sabe ya
que Mauricio Macri, el ingeniero que armó un partido llamado el PRO hace
solamente diez años, ganó las elecciones y se armó de un inmenso poder del cual
todavía se está preguntando que hacer con él.
En cambio
Daniel Scioli, gobernador de la provincia de Buenos Aires, perdió la contienda
y se está preguntando que hacer después del 10 de diciembre cuando deba
entregar el poder con 12 millones de votos positivos que no alcanzaron.
Porque la
diferencia entre uno y otro para ganar la elección fue solamente del 2,8 %, o
sea los dos tuvieron 12 millones de votos, en el caso de Macri un poquito más
para dirimir éstas agotadoras elecciones presidenciales.
Daniel
Scioli y sus operadores eligieron “machacar” y “machacar” con el tema del
accidente donde perdió un brazo, para transmitir, la voluntad y perseverancia
en la vida.
En cambio
Mauricio Macri no se aferró al secuestro que tuvo en el año 1991 para contar la voluntad que hay que
tener para salir de esa situación ni la perseverancia para seguir viviendo sin
miedo.
Qué será más
trágico y doloroso, un accidente en una lancha, dónde dejás un
brazo y la normalidad de vivir sin dolor o un secuestro dónde te meten en un ataúd, encapuchado y amordazado durante
doce días?.
Reflexiones que nos vamos
armando para ir conociendo a la persona
que tomará decisiones en las que todos estaremos involucrados.