LA VULGARIDAD QUE ATROPELLA

Cuando estar en la tele era todo glamour, era la definitiva consagración del éxito y era la oportuna situación para rodearse de poder, fama y dinero, la tele era "el lugar".

Hace ya algunos años de ésto porque llegaron algunos aparatitos, con toda la información incorporada, noticias en dos líneas, videos de 30 segundos y desconocidos famosos que son famosos porque toda una generación de adolescentes/ jóvenes lo deciden así, ya, es así, así como un milagro.

La famosa frase: "se viralizó" ya es parte de nuestro vocabulario, es la oportunidad de que mucha mucha gente se entere en un período  de tiempo muy corto de algún acontecimiento que tampoco se sabe porque causa, llama la atención.

La tele quedó en otro capítulo, en otra parte de la historia que cuesta abandonar pero que la realidad cada día que pasa, demuestra la pérdida de credibilidad, de interés y de rigor periodístico para buscar e investigar las noticias.
Nada es divertido en la tele. Nada es interesante, nada de lo que pase te roba la atención, es una costumbre instalada, nada más que eso.

 Hay un programa dónde se almuerza un día y se cena otro.
Hay un programa que tiene invitados, rara vez invitados interesantes, pero se juntan y mezclan ahí, políticos, vedettes, actores, periodistas y también alguien q no se sabe porqué pero está invitado.

Hay un programa que el sábado a la noche invitó a un personaje y que daba pena como hablaba, como estaba todo arreglado, con papeles en mano, denunciando (sin pruebas) a un montón de gente por delitos gravísimos. La conductora del programa ni cortó el monólogo de la invitada, no se refirió a las acusaciones, sólo silencio y una deplorable puesta en escena (¿todo por rating?).

Con una tele así, bienvenidos los videos de 20 segundos de duración que me muestran mis hijos, los twitters que los hacen reir, la foto que sube Messi, el gol de Ronaldo y los humoristas jóvenes que no necesitan ir a la tele porque son sus propios productores y se ríen de ellos mismos.

La tele averguenza.
Si fuera conductora me limitaría a poner música y reirme un poco de lo que me hace reir de verdad.
Bienvenida juventud que está en otro tema y no le interesa Natacha Jaitt.

Abril 2018. Marcela Milone